Durante un viaje patrocinado por UNICEF, Salma Hayek recorrió Sierra Leona vacunando contra el tétanos a los niños de este país africano. Cuando visitó una comunidad muy desfavorecida, se encontró con una madre que tenía a un bebé que no paraba de llorar por el hambre que tenía (la madre no tenía leche para alimentarlo). Salma entonces le pidió permiso a la madre, tomó al bebé y le dio el pecho, al segundo el bebé dejó de llorar.
“El bebé estaba perfectamente saludable, pero la mamá no tenía leche. Estaba muy hambriento. Yo estaba dejando de amamantar a Valentina, pero aún tenía mucha leche, así que alimenté al bebé. Deberías haber visto sus ojos. Cuando sintió el alimento dejó de llorar de inmediato”, relató Salma.
2 comentarios:
Aunque pueda parecer un montaje mediático, a mi me parece un gran gesto. Más valdría que muchos/as famosos/as aprendieran de este gesto.
Que linda, aunque es un poco extraño =)